El lunes 27 de febrero hemos hecho una salida con las monitoras de Medio Ambiente (Isabel y Laura) y nuestras tutoras para investigar nuestro núcleo urbano.
Hemos salido del colegio, hemos pasado por la Avda. Parayas para llegar a la glorieta de la Plaza de los Pueblos, hemos cruzado el puente hasta llegar al parque de Lorenzo Cagigas, (El Ferial).
Con un aparato que se llama sonómetro hemos medido el ruido que hacen los coches en decibelios, (70 Db). Después hemos apuntado la cantidad de coches que pasaba en un minuto (30) y cuántas personas viajaban en 10 coches (13 Personas), eso quería decir que había muchos coches para pocas personas.
Seguimos anotando cuántos semáforos (solo 1) y pasos de cebra (4).
Después fuimos por una calle llamada Juan XXIII, había muchas tiendas: frutería, peluquería, agencias de viajes (3), bares, pescadería, panadería, carnicería, mercería,… así que dedujimos que una familia podía comprar todo lo necesario para vivir en esa calle.
Entrevistamos a algunas personas en el parque, la mayoría eran mayores y nos dijeron cómo era el parque antes: era un ferial de ganado y estaba más viejo. Ahora a la gente le parecía que estaba bien aunque faltaban algunos columpios para bebés y algunos dijeron que no les gustaba que los perros dejaran los excrementos en la acera.
Por último a nosotros nos gustaban las fuentes, los árboles, las flores y los columpios, pero no nos gustaba la basura del suelo, los excrementos en el suelo y las palomas porque lo dejan todo sucio.
Así que nos hemos dado cuenta de que tiene ventajas vivir en Maliaño, porque tiene muchos comercio, pero también tiene bastante tráfico y ruido.
Parece que el invierno nos inspira bonitas poesías. 
